Cuando una familia recibe el Diagnóstico TEA (Trastorno del Espectro Autista) de uno de sus miembros, se abre un abanico de dudas, miedos e incertidumbre, sentimientos ambivalentes y muchas preguntas.
Sabemos que existen múltiples barreras para acceder al diagnóstico y a los apoyos necesarios y es tarea de todos trabajar para derribarlas.
Existen distintos pasos para la comunicación del Diagnóstico: preparación personal, exploración del conocimiento del paciente, exploración del deseo de recibir información, compartir la información, exploración acogida de sentimientos y planificación y seguimiento.
Es importante que el equipo a cargo de comunicar el diagnóstico a la familia sea lo más claro posible, dando lugar a todas las preguntas que surjan y brindando respuestas que contengan y ayuden a comprender dicho diagnóstico.
El TEA es un síndrome que afecta la comunicación social y la flexibilidad en distintos grados, por eso es importante que la intervención se realice tempranamente, interdisciplinariamente (multimodal), de manera intensiva e involucrando a los padres.
Los síntomas se manifiestan de formas diferentes en cada individuo y su evolución sigue varias trayectorias y caminos. La diversidad humana se resiste a la rigidez estática y unívoca de las etiquetas. Personas singulares, múltiples autismos.
Por eso resulta más apropiado decir que alguien tiene autismo y no que es autista.
Ante la complejidad del cuadro se necesita una mirada interdisciplinaria y un trabajo colaborativo y en equipo, donde se tenga en cuenta no solo las dificultades sino también las posibilidades, el potencial y las fortalezas de cada niño\a.
• Los programas de tratamiento deben apuntar a las aptitudes funcionales, la autonomía, auto determinación y la inclusión educativa y social.
• Son fundamental las orientaciones a la familia y a la escuela.
• Atender a las diferencias supone no negar la diversidad en los TEA, y la intervención debe estar centrada en la persona y sus posibilidades de aprendizaje y desarrollo.
Acompañamiento a la familia

A partir del diagnóstico se iniciaran las intervenciones con el niño y es fundamental acompañar a la familia para brindarles todas las herramientas que permitan transitar este camino de aprendizajes junto a su hijo. Para ello el equipo de salud interviniente debe evaluar si se necesitan apoyos y en caso de necesitarlos que tipo de apoyos ¿“sustanciales”, “muy sustanciales”?.

El entrenamiento a padres promueve incentivar en sus hijos las relaciones sociales tempranas, el interés compartido, la imitación a través de estrategias específicas y ayuda a favorecer el aprendizaje continuo en una variedad de situaciones, que se dan en casa a diario. Es necesario que los padres actúen en sintonía con los focos de interés de sus hijos, ayuden a mejorar su lenguaje y la comunicación.
Cabe destacar que las intervenciones mediadas por los padres constituyen un recurso de gran utilidad para las intervenciones que se realicen en los consultorios y en la escuela.

Poner el foco Lic. Cecilia Díaz- MP: 151434 en trabajar para mejorar la calidad de vida de esos niños y esas familias, bregar por el cumplimiento de los derechos de las personas con discapacidad y comprometernos con el modelo de educación inclusiva guían nuestra tarea diaria en el Centro de Salud y Educación Kreia Mar del Plata.

 

Lic. Cecilia Díaz- MP: 151434